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20.05. 2025 – 22.05.2026
ANNA PÁVLOVA. UNA VIDA SIN FRONTERAS

Anna Pávlova (1881–1931) sigue siendo una de las figuras más célebres e influyentes de la historia del ballet. Su nombre es sinónimo de gracia, arte y una dedicación inquebrantable a su oficio. Esta exposición rinde homenaje a la extraordinaria vida de Pávlova, centrándose en sus pioneras giras internacionales que acercaron el ballet a públicos de todo el mundo, mucho más allá de los teatros tradicionales de Europa y Norteamérica.

Nacida en San Petersburgo (Rusia), el camino de Pávlova hacia la fama comenzó en la Escuela Imperial de Ballet, donde se formó bajo la tutela del legendario Marius Petipa y de otros bailarines y profesores famosos de su época. A pesar de que le decían que no tenía el cuerpo «ideal» para ser una bailarina, Pávlova desafiaba todas las expectativas gracias a su precisión técnica y a una expresividad inigualable. Su papel decisivo en The Dying Swan (La muerte del cisne), coreografiado por Michel Fokine, se convirtió en una pieza emblemática que cautivó al público por su conmovedora belleza y su profundidad emocional.

En 1920, después de una ausencia de más de cinco años, Anna Pávlova volvió a actuar en Inglaterra. A pesar de haber realizado giras extraordinarias por casi todos los países de Norteamérica y Sudamérica y de su participación en Hollywood en la película La muda de Portici, Anna estaba nerviosa ante la reacción del público, cuyos gustos habían cambiado tras la Primera Guerra Mundial. Sin embargo, después de su actuación, el periódico The Times escribió:

«Madame Pávlova sigue siendo Pávlova, la incomparable. Hay otros grandes bailarines. Pero Pávlova solo hay una»

Durante la década siguiente, hasta su repentina y trágica muerte, fue la estrella mundial de su época, eclipsando a todos los demás actores, bailarines y políticos famosos. Esa fama fue fruto de un arduo trabajo y de una gran dedicación a su oficio. Desde sus primeras giras hasta las últimas, la entrega ilimitada y abnegada a la belleza y la armonía llevó a esta gran bailarina a cruzar mares y continentes.

En esta exposición el visitante encontrará programas poco comunes publicados en los rincones más diversos del planeta. Recortes de periódicos y revistas de la época los sumergirán en aquel tiempo en que el ballet apenas empezaba a conquistar el mundo y la incomparable Anna logró convencer a cientos de miles de personas de que el arte puede unir culturas y generaciones.


Colección del Museo Ruso, San Petersburgo

Avenida Sor Teresa Prat, nº 15.
Edificio de Tabacalera · 29003 Málaga

951 926 150
Web: http://www.coleccionmuseoruso.es/